Nombre: COOPER.
Edad: 6 años.
Aficiones: las chapas, robar gomas del pelo, dormir la siesta con sus humanos, masticar hierba gatera (y casi cualquier planta que caigan bajo su dominio), jugar al escondite, hablar idioma gatuno, tumbarse al sol, mirar por la ventana, amasar tripas, inspeccionar maletas, hacer nuevas amistades (felinas y humanas), cuidar a sus amigos, jugar, jugar y jugar.
COOPER es mi primer gato y fue él quien me encontró a mí. Me estuvo esperando durante todo un largo día y su noche, maullando bajo un coche aparcado en la playa de Santa María, de Cádiz; era un bebé de apenas dos meses. Esto explica su nombre: como Gary Cooper, es guapo, esbelto y un héroe anónimo, que aguardó ‘Solo ante el peligro’. Cooper es un rompecorazones, tan inteligente e ingenioso que conquista a cualquiera que pasa cinco minutos a su lado.
Apodos: Cooperín (aunque supera los 6 kilos), Amigo, El Gary Cooper de los Gatos, Guaperas, Cindy (por Cindy Crawford, véase el lunar de la nariz para entenderlo).
Nombre: CABO.
Edad: 3 años.
Aficiones: comer, las siestas con Martes, comer, intentar echar las puertas abajo para despertar a sus humanos, hacer la croqueta (o voltereta) , plantarse frente al ordenador mientras trabajas (y pasarse allí horas), atrapar ratones de juguete, cazar insectos (y comérselos), salir a saludar a todo aquel que llama a puerta, comer, recordarte (en su idioma gatuno) cuánto te quiere, ¿he dicho ya comer?
CABO es cariñoso, glotón y muy sociable con los humanos que vienen a visitarle. ¿Por qué su nombre? Nació cerca del parque natural Cabo de Gata, en Almería. Su rabo, corto y enroscado como los cabos de los pescadores, le añade más sentido. Al igual que su porte elegante y estirado, digno de un cabo (adoptado del lenguaje militar) gatuno. Adora las cajas e intentar meterse en cestas pequeñas donde no cabe. Es el chico peludo de la portada de ‘En el Nombre del Gato’, y mi novio de cuatro patas oficial (con permiso de Cooper y de Billy).
Apodos: Cabito (sí, también supera los 6 kilos), Cabicup, Peluche, Osito, Koala, Novio peludo.
Nombre: MARTES.
Edad: 2 años.
Aficiones: subirse en los hombros de sus humanos, las latas de comida húmeda, charlar idioma gatuno, las caricias, ver documentales de pájaros, cazar bichitos, amasar regazos, esconderse en los armarios, dormir la siesta abrazada a sus novios peludos Cooper y Cabo, hacer como que ignora a su tercer pretendiente felino: Billy.
MARTES, también fue ella quien me encontró a mí: en pleno invierno, maullando dentro del capó de un coche. Era un martes y 13 de diciembre, que, en lugar de venir cargado de mala suerte, tuvo un desenlace feliz. Tras superar su miedo, y después de un tratamiento intensivo a base de mimos, juegos y paciencia (que se prolongó durante largos meses), ahora es una robacorazones, tan dulce y seductora que consigue todo lo que se propone. Pero tan tímida con quienes no son sus humanos, que muchos de mis amigos no la han visto nunca en persona.
Apodos: Princesa, Preciosa, Aceitunitas verdes (véanse sus ojazos para comprenderlo), Gitana, Martillito (gran aficionada a las charlas incesantes en idioma gatuno), Princesa del Vogue, Theremín (su elocuente rabo, vibrante y estirado hacia arriba, lo explica).
Nombre: BILLY.
Edad: 1 año.
Aficiones: las caricias en la tripa, plantarse sobre las pilas de ropa limpia (y desmontarlas), jugar, perseguir objetos escondidos bajo las sábanas, amasar almohadones blanditos, que le persigas por toda la casa, acompañar a Cabo a despertar a sus humanos, comer, subirse al lavabo, hacer la croqueta, organizar piquetes gatunos para recordarte que los peludos habitantes de casa aún no han comido.
BILLY es mi cuarto gato (sí, ya sé, ¡cuatro!). Fue rescatado junto con el resto de sus hermanos. Su nombre es un homenaje al felino británico Billy, fat pants, del que me enamoré a distancia, por fotos, y que tiene ya 12 años. Billy es tímido, pero también ocurrente y muy curioso: no pierde de vista a Cooper, Cabo ni a su adorada Martes, a quienes imita en todo aquello que le resulta interesante. Un encanto peludo que no tarda en arrebatarte el corazón: siempre encuentra el modo más divertido de lograr sus ansiadas caricias humanas en la más felina intimidad.
Apodos: Billy Boy, Billy el Chico, Bola Loca (ganado a pulso: hace la croqueta cada mañana y cada noche, al llegar a casa), Tigretón.